La utilización de cebos rodenticidas de marcas reconocidas y aprobadas por las autoridades de salud ambiental, son aplicados con anterioridad a la desinsectación, permitiendo ofrecer ambientes saneados y el descarte de la presencia de roedores, evitando el riesgo de destrucción y/o deterioro de alimentos y otros; así mismo, poder evitar enfermedades como el tifus, hepatitis, triquinosis, entre otros.